¿Adiós a las baterías suicidas?
Más pequeños pero también más fiables que los sensores cerámicos, los nuevos interruptores utilizan un transistor metal-aislante Mott o MIT (Metal-Insulator Transistor) para prevenir que una batería explote por culpa de una violenta descarga eléctrica provocada a su vez por un sobrecalentamiento.
Para cuando llegue a fabricarse en serie, el ETRI espera integrar más de 16.000 de sus interruptores o 5.000 sistemas a prueba de explosiones (de estos no sabemos nada) en una superficie de unos 5 cm de diámetro. Por el momento, mientras escribimos estas líneas sus creadores están buscando socios que les ayuden a convertir su tecnología en producto. ¿Has oído, Sony? [Via]